Muchos estudiantes eligen cursar el Grado en Administración y Dirección de Empresas porque tienen en mente emprender un negocio en el futuro. Se trata, sin duda, de una excelente opción de estudios, aunque existen también otras maneras de adquirir las competencias necesarias para ser emprendedor.
Ciertamente, conocer el funcionamiento de una empresa es fundamental para poder arrancar con una idea de negocio: finanzas, marketing, logística, producción… Se tratan, todas ellas, de áreas que conforman el plan de estudios de la carrera de ADE pero que, sin embargo, deben complementarse con ciertas habilidades que son igualmente importantes en el mundo de los negocios.

Sí, ser emprendedor tiene mucho de conocimiento duro, pero también requiere una combinación de habilidades técnicas, estratégicas y personales que van más allá de los estudios. Podríamos decir que es algo así como un estilo de vida y trabajo, que contempla formas muy concretas de aproximarse a la innovación, de gestionar proyectos y de relacionarse en entornos profesionales.
El liderazgo, la visión estratégica, la capacidad de comunicación o la sensibilidad intercultural son algunas de estas soft skills que también forman parte del perfil emprendedor y que, aquí en la CEU UF3, ¡puedes aprender a cultivar y desarrollar junto a tu carrera!
Ser emprendedor: 5 habilidades (o skills) necesarias
Como has visto, muchos de los elementos que definen al emprendedor no tienen por qué estar ligados al lanzamiento de una idea de negocio. En la mayoría de los casos, ser emprendedor sí está unido a la idea de convertirse en empresario, y ese es uno de los objetivos profesionalizantes de los estudios de Administración y Dirección de Empresas; sin embargo, también se puede emprender en un negocio ya establecido o en el propio puesto de trabajo, identificando oportunidades que permitan lanzar (e implementar) nuevas ideas con impacto.
En ese caso, si puedes ser emprendedor en prácticamente cualquier sector y nivel profesional, ¿cuáles serían las habilidades más importantes que tendrías que desarrollar? ¡Te las explicamos a continuación!
- Mentalidad de crecimiento y resiliencia, que sin duda te ayudarán a afrontar positivamente los retos y aprendizajes que todo proceso emprendedor conlleva. Entrenar tu adaptación a los cambios, aprender a navegar en la incertidumbre e incluso, en algunos casos, optimizar tus tiempos de reacción resultarán fundamentales si tu objetivo es emprender un negocio.
- Capacidad de resolución de problemas, y además en todos los ámbitos. Desde las finanzas a la gestión de equipos, no son pocas las situaciones de conflicto que pueden representar un desafío para tu proyecto. Y más, si los recursos personales o materiales son limitados (como suele ser habitual en las primeras fases de cualquier proyecto de innovación).
- Habilidades de comunicación, tanto con el resto de miembros del equipo como con socios u otros agentes decisores. Da igual si lo que quieres es vender una idea, un modelo de trabajo o un producto o servicio, tu capacidad de comunicar de manera clara y persuasiva será clave para alcanzar el éxito.
- Gestión del tiempo y organización, algo muy importante para manejar tareas simultáneamente y establecer prioridades de trabajo. Ser emprendedor implica trabajar a muchos niveles al mismo tiempo, coordinando equipos, tratando con clientes o planificando próximas acciones. Mantener el foco no siempre resulta sencillo, pero sí es básico a la hora de emprender un negocio.
- Conocimiento del mercado y visión estratégica, una sensibilidad hacia los clientes y las tendencias del mercado que te ayudará a tomar buenas decisiones y a posicionarte mejor que tus competidores.
Como ves, muchas de estas habilidades no están estrictamente relacionadas con la acción financiera o de producción, pero sí afectan decididamente al funcionamiento de un negocio. Por eso, ser emprendedor va un paso más lejos que ser un empresario al uso: puedes tener un conocimiento extremadamente profundo de la logística empresarial, ¡pero ser un auténtico desastre a la hora de coordinar un equipo de trabajo!

Por ello, a los conocimientos técnicos que te puede aportar un título de máster o grado relacionado con la dirección de empresas, es importante no perder de vista el desarrollo de las llamadas habilidades blandas, pero también de las conocidas como hard skills: ¡una combinación de todas ellas te convertirá en un auténtico as de los negocios!
¿Qué estudiar si quieres emprender un negocio?
No hay un único título que sea el “mejor” para emprender, pero sí hay varias opciones que ofrecen recursos muy útiles para desarrollar un negocio propio. La elección dependerá de tus propios intereses, el tipo de negocio que quieras crear y tus aptitudes personales, pero la alternativa quizás más completa y transversal sea la del título de Administración y Dirección de Empresas.
El entusiasmo, la creatividad y el networking permanente nunca deben dejar de cultivarse en el mundo de los negocios
Sin embargo, la gestión empresarial ha variado sustancialmente en los últimos años, y ya desde la Universidad CEU Fernando III, se ofrecen nuevos títulos de grado y posgrado acordes a las últimas tendencias globales y de digitalización. Así, el Grado en Inteligencia de los Negocios presenta todos los fundamentos del funcionamiento de un negocio, pero desde una perspectiva analítica y de datos; o el Grado en Marketing y Gestión Comercial, que te aporta una formación y experiencia práctica que podrás aplicar a prácticamente cualquier sector de actividad.
3 cosas que debes saber antes de lanzar tu idea de negocio
Pero, más allá de tus certificaciones y conocimientos técnicos, ser emprendedor te demandará un proceso continuado de desarrollo, autoconocimiento y crecimiento profesional. Por ello, ¡no olvides estos últimos consejos antes de iniciar tu camino en el mundo de la dirección de empresas!
- No te bastará con tener una buena idea, tendrás que ser capaz de aterrizarla, hacerla tangible y ejecutarla. Y, por supuesto, cambiarla si no termina de germinar.
- Al principio, tendrás que aprender absolutamente de todo: ventas, contabilidad, redes sociales, estrategia, ¡incluso algo sobre experiencia del usuario!
- El fracaso es una parte importante del proceso, así que no le tengas miedo. No todos los intentos van a funcionar, y eso está bien: lo importante es que aprendas de los errores y te adaptes rápidamente a ellos.
Convertirte en emprendedor te permitirá tomar el control de tu propio destino profesional, desarrollar tus ideas y construir algo que refleje tus valores y visión. Emprender no solo es una forma de ganarse la vida, sino también una vía para dejar huella y vivir con propósito; y, por ello, desde la Universidad CEU Fernando III de Sevilla queremos acompañarte en la construcción de ese propósito.